Identificación de potenciales perpetradores
Los ataques y tiroteos individuales son aquellos que han sido planificados y ejecutados por una sola persona. Hay una amplia variedad de modus operandi y de causas para llevar a cabo un ataque de este tipo, siendo difícil establecer perfiles muy ajustados. No obstante, se puede hablar de algunos patrones comunes que pueden ayudar a identificarlos y a prevenirlos.
1. Los atacantes suelen hablar de sus planes con alguien cercano antes de llevar a cabo los ataques o tiroteos. Los atacantes suelen “advertir” también con antelación de lo que están planeando, ya sea a alguien de su entorno, por redes sociales o a través de un comunicado o escrito. En el caso de ataques en colegios, los confidentes suelen ser personas de la misma edad, por lo que, o no se lo cuentan a ningún adulto o, de hacerlo, no son tomados en serio. En otros casos, al ser la persona un “lobo solitario” en todos los aspectos de su vida (incluso, a veces, pueden ser consideradas socialmente personas “raras”) no se presta atención a lo que dicen sobre los ataques que tienen pensado cometer, por lo que se pierden oportunidades de prevención. En otras ocasiones, los “lobos solitarios” pueden llegar a ser alentados por otra persona a perpetrar el ataque.
2.Los atacantes suelen planificar a conciencia sus actos, incluso realizar alguna especie de “simulacro”. Construyen un plan meticulosamente estructurado y pensado con antelación, y suele haber, incluso, planes sobre lo que ocurrirá después de perpetrar los hechos (enfrentarse a la policía, huída, suicidio, o entregarse, etc.). Los ataques y tiroteos individuales, por tanto, no suelen ser actos impulsivos, sino comportamientos que se han discernido durante un periodo de tiempo concreto.
3. Los atacantes suelen tener un acceso fácil a las armas que utilizan o a los materiales que usan en su construcción. También suele darse un interés previo por conocer las mejores formas de perpetrar los hechos que planean, así como las armas más adecuadas. Un repentino interés por conocer o adquirir/fabricar/preparar armas suele ser un buen indicador de riesgo.
Sin embargo, como ya se ha mencionado, es difícil establecer un perfil sobre estos atacantes, dada la variedad y diferenciación individual. Por ello, debe quedar claro que, ni una persona con algunos de los rasgos de “lobo solitario” tiene porqué terminar cometiendo un ataque, ni las personas que cometen ataques individuales tienen que tener estos rasgos o haber presentado alguno de los indicadores mencionados.
Implementación de políticas públicas para prevención de incidentes de tirador activo.
Para prevenir y evitar ataques y tiroteos individuales deben establecerse medidas rigurosas tanto en los colegios como en Internet (para combatir la radicalización) como a nivel estatal y político. Muchas de estas medidas también son útiles para reducir las tasas de suicidio asociadas a armas de fuego. En este artículo te contamos qué profesionales deben formarse en prevención de los ataques terroristas y la radicalización.
A continuación, se detallan las 11 medidas preventivas emitidas por el senador de EEUU John Hickenlooper, a tener en cuenta:
1. Establecer exámenes precisos y rigurosos para la compra y obtención de certificados de armas en todos los países. Comprobar antecedentes y realizar exámenes médicos y psicológicos puede salvar muchas vidas.
2. Establecer límites para la obtención de “complementos” y munición armamentística, de modo que solo sea posible adquirir una determinada cantidad concreta que limite las consecuencias en caso de que se produzca un ataque masivo.
3. Prohibir en todos los países la obtención y el uso de armas de asalto.
4. Financiar y promover la intervención comunitaria contra la violencia.
5. Endurecer y reforzar las leyes relativas al tráfico, y fabricación de armas.
6. Detener la proliferación de “pistolas fantasmas”, que son aquellas que se pueden ensamblar en casa con piezas que se han pedido online o que han sido producidas por una impresora 3D. Como no hay un examen previo porque están “fuera del mercado”, no pueden ser detectadas por la policía, lo que supone un importante riesgo. Una buena forma de evitar esto es tratar de reducir la información en Internet sobre la fabricación y construcción de este tipo de armas.
7. Exigir responsabilidades, incluso penales, a los fabricantes y vendedores de armas imprudentes o negligentes si no respetan los estándares y normas establecidas.
8. Implementar leyes que permitan impedir el acceso a armas de fuego a individuos que estén temporalmente incapacitados para la utilización de las mismas, ya sean particulares o miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
9. Educar a la población en estos temas y apelar a la responsabilidad individual para detectar y prevenir ataques que puedan estar preparando personas cercanas o personas que hablen de ello en redes sociales, por ejemplo. Es fundamental establecer en la base de la sociedad una cultura de seguridad de las armas de fuego. También es importante, por los tiroteos en colegios, concienciar, prevenir y erradicar el acoso escolar en los centros, ya que muchos de los niños que portan armas en colegios lo hacen para sentirse protegidos cuando son acosados. Si quieres formarte en prevención del acoso, te recomendamos este curso.
10. Establecer planes de actuación y protocolos de autoprotección frente a ataques masivos, que deben ser ensayados y conocidos por todos. Si alguien realiza una llamada avisando del ataque, debe tenerse siempre en cuenta y llevar a cabo las medidas oportunas para evitar que se produzca. En este artículo te contamos cómo actuar frente a un aviso de un ataque.
11. Considerar los ataques y tiroteos individuales como problemas de salud pública con graves consecuencias prevenibles. Dar importancia a la salud mental y promover la ayuda psicológica.
MEDIDAS DE AUTOPROTECCIÓN EN UN ATAQUE O TIROTEO
Te planteamos 4 sencillas medidas que puedes llevar a cabo para protegerte frente a un ataque o tiroteo individual:
1. Busca un lugar seguro para resguardarse. Si puedes alejarte del lugar, hazlo. Si correr resulta peligroso, resguardate en un lugar seguro como detrás de un muro o cúbrete con objetos grandes. Si te encuentras en un lugar abierto y no puedes huir, échate en el suelo colocando tus manos sobre tu cabeza.
2.Evita el contacto visual con el atacante y no hagas fotografías o vídeos ni realices llamadas por teléfono en presencia de éste.
3.Bloquea y aléjate. Si puedes, enciérrate en algún lugar y bloquea posibles entradas. Aléjate de puertas y ventanas. Utiliza todo lo que esté al alcance para protegerte: sillas, mesas, cajas, estanterías, etc.
4.Comunica los hechos. Cuando sea seguro, comunica los hechos a las autoridades.
MEDIDAS DE AUXILIO EN UN ATAQUE O TIROTEO INDIVIDUAL
Atención de heridos en tiroteos priorizando el control de hemorragias.
Las acciones iniciales para el control de la hemorragia deben formar parte de la respuesta de las Fuerzas de Seguridad Pública y, los conocimientos para el control de la hemorragia, tienen que ser una parte central de sus habilidades, para no tener que esperar al arribo de una ambulancia lo que puede salvar su propia vida o la de sus compañeros. La experiencia militar nos ha enseñado que la causa principal de muerte evitable en una víctima con trauma penetrante es la hemorragia. Los programas de capacitación especializados cómo Tactical Combat Casualty Care (TCCC)®, cuando son implementados con un apoyo sólido de la dirección, han producido una reducción drástica de las muertes evitables. El Consenso Hartford recomienda que una respuesta integrada entre fuerzas de seguridad pública, bomberos, y ambulancias para incidentes de tirador activo debe incluir las acciones críticas contenidas en el acrónimo THREAT:
1. Eliminar la amenaza (Threat suppression)
2.Control del la Hemorragia (Hemorrhage control)
3.Extracción Rápida a zona segura (Rapid Extrication to safety)
4.Evaluación por personal sanitario (Assessment by medical providers)
5.Traslado para el tratamiento definitivo (Transport to definitive care)
Los primeros respondientes deben de tener claro que realizar presión directa sobre una herida sangrante es la primera acción adecuada a llevar a cabo y que sus manos son el primer recurso disponible. En la mayoría de los casos el control de la hemorragia externa se puede realizar por medio de presión directa sobre el vaso sangrante. Se pueden necesitar agentes hemostáticos y torniquetes para controlar el sangrado de forma efectiva. Por esta razón, el Consenso Hartford recomienda que todos los policías y los ciudadanos capacitados lleven un agente hemostático (venda hemostática) un torniquete y guantes. Esta recomendación es también aplicable al personal de Servicios de Emergencia que incluyen Ambulancias, Bomberos, y Rescate. Los vehículos de traslado aéreo y terrestre deben de llevar varios agentes hemostáticos y torniquetes en base a las necesidades locales. Además, debe de haber disponibles mochilas de control de hemorragias en lugares como centros comerciales, museos, hospitales, colegios, teatros, polideportivos, estaciones de medios de transporte (como aeropuertos, estaciones de autobuses y estaciones de tren) y, en instalaciones de acceso limitado o retrasado. Todos los agentes hemostáticos y los torniquetes deben de ser de eficacia clínica demostrada y documentada por estudios científicos.
El contenido de las mochilas para el control de sangrado debe de incluir lo siguiente:
1. Vendajes compresivos.
2.Agentes hemostáticos (venda hemostática) seguros y efectivos.
3.Torniquetes efectivos.
4.Guantes de protección personal.
La colocación de las mochilas para el control del sangrado debe de ser:
1. En establecimientos con grandes concentraciones de personas.
2.Inmediatamente localizables visualmente o vía aplicación web.
3.En lugares seguros pero accesibles.
4.Con capacidad de uso en tres minutos.
Implementación de políticas públicas para disminución de muertes por tiroteos.
La asistencia a las víctimas es una responsabilidad compartida por las Fuerzas de Seguridad, Bomberos, Ambulancias y otros servicios de emergencia. Los resultados óptimos dependen de la comunicación entre el personal de seguridad pública. La respuesta a un incidente con tirador activo es un proceso que requiere la coordinación entre las Fuerzas de Seguridad y el personal médico/de evacuación.
Dicha coordinación incluye pero no se limita a:
1. Desarrollo de procedimientos operacionales estándar durante para la respuesta a incidentes con tiradores activos que involucre a las fuerzas de seguridad pública, operadores telefónicos de emergencia, y servicios de emergencia públicos, voluntarios y privados y capacitación para todo el personal involucrado.
2.Implementación del Sistema de Comando de Incidentes, en incidentes de tirador activo.
3.Utilización de terminología común entre distintas corporaciones de emergencia.
4.Prioridad de la inclusión de incidentes con tiradores activos en el entrenamiento y simulacros para mejorar la familiarización con los protocolos conjuntos desarrollados.
Conseguir la formación y el equipo para el control del sangrado requiere la implicación del Gobierno a través de las dependencias de seguridad pública, protección civil y salud, tanto de nivel estatal, regional o municipal así como del sector privado y social. La adquisición de torniquetes y agentes hemostáticos debe reflejar la mejor evidencia científica disponible. Las instituciones a nivel nacional deberían de establecer la eliminación de la muerte evitable por hemorragia como una prioridad que influirá a la hora de realizar los presupuestos. A nivel regional y local, el gobierno debe establecer contratos con empresas privadas para identificar las amenazas potenciales en lugares públicos y centros de trabajo. Es también importante destacar que las comunidades pueden participar en actividades de recaudación de fondos a nivel local para la compra de material. Las organizaciones profesionales deben crear estándares que alienten a la educación, equipamiento y formación de los intervinientes inmediatos, los cuales deben de presentarse como una medida de seguridad pública. Los voluntarios pueden ser un recurso para llevar a cabo la formación.
Las consideraciones a tener en cuenta para la creación y sostenibilidad de los programas de control de sangrado incluyen lo siguiente:
1. Empleo de un mensaje claro y conciso de que el control del sangrado es una responsabilidad de los sectores público y privado.
2.Participación del sector privado, incluidas las empresas y las asociaciones comerciales.
3.Llamada a las organizaciones filantrópicas.
4.Solicitud de subvenciones de las agencias gubernamentales y privadas.
5.Participación de organizaciones profesionales, comunitarias, sociales y sin ánimo de lucro.
CONCLUSIÓN
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